La leche frita es un postre casero y tradicional que todos conocemos. Es de textura cremosa, pero consistente. En cada cocina se le aporta un toque diferente, pero todas las recetas tienen en común la cocción de la leche con la canela y la piel de limón. Al ser un postre frito adquiere un color dorado que mezclado con el azúcar y la canela en polvo....... ¡delicioso!.
El Delantal de Rosario le da una vuelta a la tradicional receta y os presenta esta leche que seguro será una delicia para los paladares más exigentes.
INGREDIENTES:
- 1 yema de huevo y 1 huevo entero
- 300 ml. de leche
- 80 ml. de aceite
- 80 ml. de agua
- 40 gr. de azúcar
- 30 gr. de harina
- 15 gr. de Maizena
- un chorrito de anís dulce
- 1 palo de canela
- piel de limón
- harina para el rebozado
- azúcar y canela molida para rebozar
PREPARACIÓN:
Ponemos tres cazos a la vez en el fuego. Uno con el aceite, otro con la leche, la canela y la piel de limón y el tercero con el agua, el azúcar y el anís.
Cuando el aceite esté caliente, lo retiramos del fuego y le añadimos la harina y la Maizena, mezclando rápidamente para evitar que se formen grumos. A continuación ponemos el almíbar que hemos preparado con el azúcar y el anís y por último la leche a la que habremos retirado la canela y el limón. Cuando lo tenemos todo bien mezclado, ponemos la yema de huevo, integrándola bien en el preparado.
Preparamos un recipiente untado con mantequilla, en él vertemos la masa obtenida y dejamos enfriar en la nevera 4 horas.
Batimos el huevo entero con la clara. Preparamos un poquito de harina en un bol. Sacamos de la nevera la base de la leche frita. Desmoldamos y cortamos en cuadraditos. Pasamos por harina y el huevo batido y freímos en abundante aceite caliente. Sacamos y escurrimos bien y por último, rebozamos con azúcar y canela.
Aunque es laboriosa su preparación, está tan rica que merece la pena el trabajo realizado.
Realmente deliciosa.
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