En nuestro país el cultivo del arándano se localiza en Huelva y Asturias. Su tamaño es parecido al de una aceituna y pueden ser rojos o de color negro-azulado.
Son muy apreciados por sus propiedades antibacterianas, siendo muy eficaces para combatir las infecciones de orina y digestivas.
Tienen un sabor agridulce que se realza cuando se cocinan. Se utilizan mucho para preparar confituras y repostería.
El Delantal de Rosario os propone este pastel que nos endulza el paladar y nos beneficia con las propiedades de este fruto.
Vamos a ver cómo se hace.
INGREDIENTES:
- 200 gr. de harina
- 150 gr. de azúcar
- 100 gr. de mantequilla en pomada
- 1 sobre de azúcar vainillado
- 2 huevos
- 100 ml. de leche
- 1 manzana grande
- 50 gr. de arándanos deshidratados
- 1 sobre de levadura
- 2 cucharadas de azúcar moreno
PREPARACIÓN:
Ponemos los arándanos en un bol con un poco de agua para que se hidraten, unos 20 minutos. Escurrimos y reservamos.
En otro bol batimos los huevos con el azúcar y el azúcar vainillado hasta que blanqueen. Añadimos la mantequilla y continuamos batiendo. Ponemos la leche y a continuación, agregamos la harina tamizada junto con la levadura.
Pelamos y cortamos la manzana en gajos finos.
Vertemos la masa en un molde que habremos untado con mantequilla y espolvoreado con harina. Colocamos encima la manzana y los arándanos y cubrimos con el azúcar moreno.
Metemos en el horno precalentado, a 180º C unos 45-50 minutos, dependiendo de cada horno. Para comprobar que está hecho, pinchamos con la punta de un cuchillo y si sale limpio, el pastel estará listo.
El sabor agridulce de los arándanos contrasta con el dulce de la manzana y del azúcar moreno, dando un toque diferente a este pastel.
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