MILHOJAS DE CALABACÍN

Cuando hablamos de "milhojas", la relación que hacemos de forma inmediata es "hojaldre dulce con crema o con merengue". ¿Sabéis cómo surgió?. Según se cuenta fue por casualidad, un error de un panadero en la elaboración diaria de una masa, dio lugar al ligero y crujiente hojaldre.

Me he permitido designar a este plato como "milhojas" por las diferentes capas de calabacín con relleno que lo conforman. 

Es fácil y rápido de hacer, muy resultón y nada pesado para las digestiones veraniegas. 

Vamos a ver cómo se hace.

INGREDIENTES (para 4 personas):

- 1 calabacín de buen tamaño

- 8 lonchas de queso

- 8 lonchas de jamón york

- 2 tomates medianos o 1 grande

- queso rallado

- orégano

- pimienta negra molida

- perejil

- 2 cucharadas de aceite de oliva

- sal

PREPARACIÓN:

Lavamos el calabacín, lo cortamos en rodajas finas y salamos ligeramente. Ponemos una sartén al fuego con el aceite y pasamos el calabacín un minuto. Lo retiramos y vamos colocando en una fuente que resista en el horno. 

Ponemos una rodaja de calabacín, una de tomate espolvoreado de sal y orégano, calabacín, queso, calabacín, jamón de york, calabacín....así hasta finalizar con una rodaja de calabacín sobre la que ponemos queso rallado, orégano y pimienta a gusto.

Metemos en el horno para gratinar unos 8-10 minutos. Sacamos, colocamos en los platos y espolvoreamos con perejil recién picado.

¿A qué es fácil?. Animaros a prepararlo.