Si buscamos el origen de los raviolis, encontraremos diferentes historias al respecto, sin que podamos afirmar que son verdaderas o falsas. Una de las versiones del origen cuenta que fue Marco Polo quien trajo la pasta, y en este caso los raviolis, desde China a Italia y desde ahí al resto de Europa y del mundo.
Ravioli es el nombre que se da a la pasta doblada, rellena de distintos ingredientes y cuyo sabor y textura es muy agradable.
Esta receta que os propongo es muy fácil de hacer, quizás lo más laborioso sea preparar la pasta para hacer nuestros propios raviolis. Vamos a verlo de este modo: cuando amasamos hacemos ejercicio y el ejercicio es saludable, así que vamos manos a la masa.
INGREDIENTES (para 4 personas):
Para la masa de los raviolis:
- 400 gr. de harina
- 4 huevos
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- agua
- 1/2 cucharadita de sal
Para el relleno:
- 1 calabacín mediano
- 1 cebolla mediana
- 100 gr. de queso
- 100 gr. de jamón serrano
- 3 cucharadas de aceite
Para la salsa:
- 1 tomate maduro grande
- 1 cebolla
- 1 pimiento verde
- 4 cucharadas de aceite de oliva
- sal
PREPARACIÓN:
En un bol ponemos la harina mezclada con la sal. Hacemos un hueco en el centro y echamos los huevos, el aceite y un par de cucharadas de agua. Mezclamos con los dedos y amasamos hasta que la masa quede muy elástica, añadimos agua si vemos que es necesario. Continuamos amasando por lo menos 10 minutos, hasta que la masa no se pegue a las manos. Entonces la envolvemos en papel film y la dejamos reposar unos 30 minutos.
Mientras preparamos el relleno.
Lavamos muy bien el calabacín y lo cortamos a dados pequeños. Pelamos y cortamos muy menudita la cebolla. Ponemos una sartén al fuego con el aceite y las verduras y dejamos que se pochen. Picamos el jamón menudo y lo agregamos un par de minutos antes de retirar la sartén.
Pasada la media hora, estiramos la masa muy fina y formamos tiras largas de unos 5 cm de ancho. Vamos poniendo cucharaditas de calabacín sobre una tira, dejando espacio entre los montoncitos y sobre cada uno, colocamos un dadito de queso. Con otra tira los cubrimos y presionamos con suavidad alrededor del relleno. Cortamos el ravioli con la forma que queramos. Hacemos ésto con toda la masa y relleno.
Una vez listos todos los raviolis, ponemos una cacerola grande al fuego con agua y sal. Cuando comience a hervir, vamos echando los raviolis y dejamos que se hagan unos 5 minutos. Escurrimos bien y reservamos.
Lavamos y cortamos el tomate y el pimiento muy menudito y también la cebolla. Ponemos una sartén al fuego con el aceite y dejamos que se haga. Salamos a gusto. Antes de retirar del fuego añadimos los raviolis y dejamos unos 5 minutos más. Ya estarán listos para comer.
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