Podemos tomar el café de muy distintas formas, dependiendo del gusto de cada uno. Puede prepararse la infusión sola o añadirle otros ingredientes.
Las formas más habituales de tomar café son:
- Café solo que es el que preparamos con agua y café molido y que sirve de base para el resto de cafés. Se toma en taza pequeña.
- Café con hielo es el café solo al que acompañamos con 3 o 4 cubitos de hielo. El contenido de la taza lo vertemos en un vaso con hielo.
- Café con leche se sirve el café solo al que se añade leche que se calienta aparte. Lo tomamos en taza grande.
- Café cortado, también se toma en taza pequeña que llenamos hasta algo más de la mitad con café y el resto con leche caliente.
- Café descafeinado, se toma como el café con leche con la diferencia de la materia prima: café descafeinado molido, liofilizado o de sobre.
- Carajillo es el café solo al que se añade un poco de brandy.
- Café bombón es el que tomamos en vaso-copa. En el fondo se pone leche condensada, cubrimos con café solo y rematamos con una nube de nata y azúcar.
Capuccino, cubanito, vienés, escocés, irlandés...contamos con variedad para disfrutar del sabor y olor del café.
He utilizado el café como ingrediente en este bizcocho y el resultado me parece muy bueno. Para disfrutar en las tardes de otoño con familia y amigos con un buen café, o por qué no, también con un té, este bizcocho es perfecto.
INGREDIENTES:
Para el bizcocho:
- 3 huevos
- 2 cucharaditas de café soluble
- 200 gr. de harina
- 50 gr. de almendra molida
- 150 gr. de mantequilla en pomada
- 125 gr. de azúcar
- 1 sobre de levadura en polvo
Para la crema:
- 200 gr. de queso cremoso para untar
- 2 cucharaditas de café soluble
- 1 cucharada de agua caliente
- 4 cucharadas de azúcar
Para el caramelo de café:
- 3 cucharadas de azúcar
- 1 cucharadita de café soluble
- 1/2 taza de agua caliente
PREPARACIÓN:
Comenzamos con el bizcocho.
En un bol ponemos el azúcar con la mantequilla y mezclamos bien. Agregamos los huevos y batimos hasta que queden bien integrados. Añadimos el café y la almendra molida y removemos bien. Por último ponemos la harina tamizada con la levadura. Mezclamos bien. Vertemos en un molde que habremos untado con un poquito de aceite y espolvoreado con harina. Introducimos en el horno, previamente precalentado, a 180ºC durante 25-30 minutos. Pinchamos con la punta de un cuchillo para comprobar que esté cocido y sacamos del horno. Dejamos enfriar.
Preparamos la crema.
Mezclamos el queso con el azúcar. Disolvemos el café en la cucharada de agua caliente y agregamos al queso. Batimos bien y dejamos tapado en la nevera hasta que vayamos a extenderlo en el bizcocho.
Nos ponemos manos a la obra con el caramelo.
En una sartén antiadherente ponemos el azúcar y, sin mover, dejamos que se haga caramelo. Mientras, disolvemos el café en el agua caliente. Cuando el azúcar esté dorada, añadimos con cuidado el café disuelto y dejamos a fuego bajo hasta que se integre bien con el azúcar caramelizada. Retiramos del fuego y dejamos enfriar unos 5 minutos.
Cuando el bizcocho esté frío, lo desmoldamos y cortamos por la mitad en sentido horizontal.
Calamos la mitad que sirve de base con parte del caramelo de café. Sobre esta base extendemos la crema y cubrimos con la otra mitad del bizcocho que calaremos con el resto del caramelo de café.
Ya lo tememos listo para disfrutar en buena compañía y con un reconfortante café o té.
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