Si hablamos de vinagres, rápidamente los relacionamos con sus usos en la cocina, aunque con toda seguridad a alguna y alguno también se le pasan por la cabeza sus utilidades a la hora de la limpieza de cristales o baños, cepillado de alfombras, aliviar picaduras o para dar brillo al pelo. Así que, más allá de ser sólo un aderezo, se convierte también en un buen aliado en algunas tareas domésticas.
El vinagre tiene propiedades antisépticas y desinfectantes, por ello fue muy utilizado en la antigüedad para conservar alimentos. Se mezclaba con otros ingredientes como pimentón, orégano, ajos y sal, dando lugar al adobo que conocemos y que, aunque usado como conservante, en nuestra cocina actual, se utiliza también para dar sabor y color a los platos.
Esta es una empanada, sin la masa típica de la misma, quizás he sido algo atrevida por llamarla así. Muy rápida de preparar y admite múltiples rellenos. Yo la he hecho con la palometa adobada y está muy buena. Os animo a que la preparéis.
INGREDIENTES (para 4 personas):
Para la palometa adobada:
- 350 gr. de palometa en filetes
- 150 ml. de vinagre (puede ser de vino o manzana)
- 1 cucharada de pimentón dulce
- 1 cucharada de orégano
- 1 diente de ajo
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 2 hojas de laurel
- sal
Para la empanada:
- 8 rebanadas de pan de molde al que quitamos la corteza
- 2 pimientos verdes
- 2 cebolletas no muy grandes
- 2 cucharadas de aceite
- 1 huevo
- mantequilla
- sal
PREPARACIÓN:
Limpiamos los filetes de palometa y los cortamos trozos.
Machacamos en un mortero el diente de ajo con la sal. Agregamos el vinagre, pimentón, orégano, el aceite y el laurel. Mezclamos todo bien.
En un bol ponemos la palometa y la cubrimos con la mezcla anterior. Tapamos con papel film y dejamos en la nevera al menos durante 3 horas, mucho mejor si la preparamos de un día para otro.
Pasado el tiempo de reposo, ponemos una cacerola al fuego en la que echamos la palometa. Agregamos medio vaso de agua y dejamos a fuego medio 10 minutos. No necesita mucha cocción. Retiramos del fuego y sacamos la palometa procurando que no tenga mucha salsa.
Lavamos y cortamos los pimientos en tiras. Pelamos y cortamos las cebolletas en rodajas. Ponemos una sartén al fuego con 2 cucharadas de aceite y sofreímos la verdura con un pellizco de sal. Cuando esté tierna, retiramos y reservamos.
Batimos el huevo.
Preparamos una fuente de horno untada con mantequilla.
Estiramos las rebanadas de pan con un rodillo, dejándolas finas.
Untamos las rebanadas, por ambas caras, con una ligera capa de mantequilla. Colocamos 4 rebanadas en la fuente. Sobre cada una, ponemos una capa de sofrito, palometa y otra capa de sofrito. Pintamos los bordes de cada rebanada con huevo. Cubrimos con el resto de rebanadas que también habremos untado con mantequilla. Pegamos bien los bordes y pintamos con huevo toda la superficie del pan.
Metemos en el horno precalentado, a 180º durante 8 minutos o hasta que la superficie del pan esté dorada y crujiente.
Es una empanada diferente y muy rica.
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