PASTEL DE COL Y SALCHICHAS

Lo cierto es que la col puede resultar poco atrayente a la hora de comer, quizás sea porque la solemos preparar hervida, en cocidos o potajes y algunas veces preparamos rollitos de col rellenos como algo fuera de lo habitual...resulta aburrida, ¿verdad?.
Hay que cambiar esa idea de "otra vez col, ¡puff!". Además de los buenos cocidos y ricos potajes, existen otras formas de preparar la col. 
Va a encantaros este pastel. Las apariencias pueden haceros creer que es pesado, pero nada más lejos de ese pensamiento: el pastel de col resulta ligero, delicioso y podéis servirlo caliente o frío, ¿se puede pedir más?


INGREDIENTES (para 4 personas):
         Para la masa:
- 300 gr. de harina
- 1 huevo
- 1/2 vaso de leche 
- algo menos de 1/2 vaso de aceite de oliva
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- sal
         Para el relleno:
- 300 gr. de col blanca
- 1 cebolla
- 1 manzana de buen tamaño
- 1 zanahoria
- 1 paquete de salchichas frankfurt
- 6 cucharadas de leche
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- 1/2 cucharadita de comino en polvo
- pimienta negra molida
- sal

PREPARACIÓN:
Mezclamos en un bol la harina con la levadura, la leche, el aceite, el huevo y la sal. Amasamos hasta que la masa quede blandita y sin pegarse a los dedos. Formamos una bola y dejamos reposar tapada en el bol durante media hora.
Pelamos la cebolla y la cortamos menudita. También pelamos la zanahoria y la manzana y las rallamos. Lavamos y cortamos la col en tiras finitas. 
Ponemos el aceite en una sartén y pochamos las verduras junto con la manzana y la leche. Echamos el comino, pimienta a gusto y sal.  Cuando todo esté tierno, retiramos y reservamos.
Dividimos la masa en dos. Estiramos una parte y cubrimos el fondo y las paredes de un molde que habremos untado con un poco de aceite. Ponemos la mitad de las verduras sobre la masa, cubrimos con las salchichas troceadas y vertemos sobre ellas el resto de la col. Estiramos la masa que nos queda y tapamos el pastel, sellando bien los bordes. Hacemos una incisión en el centro y pintamos con un poco de leche para que quede un bonito color dorado.
Introducimos el molde en el horno precalentado, a 180º C, durante unos 45 minutos, hasta que veamos la masa crujiente y doradita. 
Sacamos del horno y dejamos entibiar un poco antes de desmoldar. Lo podemos comer caliente o frío, muy rico de las dos formas.

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