AJOBLANCO

Ya empieza a hacer calor y no tenemos ganas de sentarnos a la mesa ante un plato humeante aunque esté riquísimo. Ahora nos apetecen comidas fresquitas.

Como nieta e hija de malagueñas, el ajoblanco casi que acompaña a la sangre en mis venas. No podía dejar pasar más tiempo sin compartir la receta de esta sopa fría que hacemos en casa. Las medidas de los ingredientes las suelo poner a ojo, sobre todo la cantidad de pan, pero esta vez he medido y pesado para daros una mejor orientación de las cantidades.

Ayer lo acompañé con manzanas y me pareció un ajoblanco muy rico, la mezcla de sabores y el crujiente de la manzana le daba un toque crunch divertido. Suele acompañarse de uvas o melón, pero creo que os gustará con manzana también. 

¿A quién le apetece una sopa fría?

INGREDIENTES (para 4 personas):

- 1 l. de agua muy fría

- unos 150 gr. de pan del día anterior (mejor de 2 días)

- 1/2 vaso de los de agua, de aceite de oliva virgen extra

- 2 cucharadas de vinagre de vino blanco

- 125 gr. de almendras crudas

- 2 dientes de ajo

- sal

PREPARACIÓN:

Ponemos el pan a remojo con un poco de agua. Trituramos muy finas las almendras. Agregamos los ajos, triturándolos también. Añadimos el aceite, vinagre y el pan. Trituramos todo bien para que nos quede una crema fina. 

Vertemos sobre esta crema el agua muy fría y mezclamos para integrar todos los ingredientes. Ponemos a punto de sal y podemos dejar en la nevera para que se mantenga frío. Servimos acompañado de uvas, melón o manzana.

Es sencillo y fácil de preparar. Refrescante, nutritivo y riquísimo ¿os váis a resistir?