La miel es uno de los alimentos que más apreciamos por sus propiedades y beneficios. Es rica en minerales, ayuda a regular el sueño y el azúcar en la sangre, es un laxante suave, tiene propiedades cicatrizantes y antisépticas, refuerza el sistema inmunológico, ayuda a hacer la digestión, mejora la función cerebral....seguro que me dejo algo atrás... En definitiva, es estupenda para nuestra salud.
Aparece como ingrediente en recetas dulces sobre todo, pero también en salsas que acompañan carnes y queda genial en las vinagretas para ensaladas.
Es un ingrediente fundamental en esta receta que, convencida estoy, os va a gustar mucho.
Aquí está
INGREDIENTES:
- 125 gr. de miel que sea suave de sabor
- 1 huevo grande
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 1/2 cucharadita de clavo molido
- 1/2 cucharadita de canela molida
- 1/4 cucharadita de nuez moscada molida
- ralladura de 1 limón
- 1 cucharada colmada de mantequilla en pomada
- 80 gr. de azúcar
- 225 gr. de harina
- 1 puñado de almendras crudas picadas
- cerezas confitadas
- un pellizquito de sal
PREPARACIÓN:
En un cazo ponemos la miel junto con el azúcar y la mantequilla. Calentamos a fuego suave, removiendo constantemente sin que llegue a hervir, hasta que se disuelva el azúcar. Retiramos entonces del fuego y dejamos que se enfríe.
Tamizamos la harina con las especias, levadura y la sal. Añadimos la ralladura de limón y mezclamos todo.
Añadimos el huevo a la miel y removemos ligeramente. Incorporamos a los ingredientes secos. Integramos todo bien.
Engrasamos un molde cuadrado o rectangular. Ponemos papel vegetal en la base y untamos con un poco de mantequilla. Vertemos la masa en el molde. Extendemos uniformemente y colocamos las cerezas y almendras de manera que una vez horneado podamos dividir en pastelitos.
Introducimos en el horno precalentado, a 180º C durante 35 minutos. Antes de sacar del horno debéis comprobar que esté cocido pinchando con una brocheta o la punta de un cuchillo que debe salir limpio.
Retiramos del horno. Dejamos enfriar. Una vez frío, cortamos los pastelitos y listo.
Deliciosos para acompañar el café.
Aparece como ingrediente en recetas dulces sobre todo, pero también en salsas que acompañan carnes y queda genial en las vinagretas para ensaladas.
Es un ingrediente fundamental en esta receta que, convencida estoy, os va a gustar mucho.
Aquí está
INGREDIENTES:
- 125 gr. de miel que sea suave de sabor
- 1 huevo grande
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 1/2 cucharadita de clavo molido
- 1/2 cucharadita de canela molida
- 1/4 cucharadita de nuez moscada molida
- ralladura de 1 limón
- 1 cucharada colmada de mantequilla en pomada
- 80 gr. de azúcar
- 225 gr. de harina
- 1 puñado de almendras crudas picadas
- cerezas confitadas
- un pellizquito de sal
PREPARACIÓN:
En un cazo ponemos la miel junto con el azúcar y la mantequilla. Calentamos a fuego suave, removiendo constantemente sin que llegue a hervir, hasta que se disuelva el azúcar. Retiramos entonces del fuego y dejamos que se enfríe.
Tamizamos la harina con las especias, levadura y la sal. Añadimos la ralladura de limón y mezclamos todo.
Añadimos el huevo a la miel y removemos ligeramente. Incorporamos a los ingredientes secos. Integramos todo bien.
Engrasamos un molde cuadrado o rectangular. Ponemos papel vegetal en la base y untamos con un poco de mantequilla. Vertemos la masa en el molde. Extendemos uniformemente y colocamos las cerezas y almendras de manera que una vez horneado podamos dividir en pastelitos.
Introducimos en el horno precalentado, a 180º C durante 35 minutos. Antes de sacar del horno debéis comprobar que esté cocido pinchando con una brocheta o la punta de un cuchillo que debe salir limpio.
Retiramos del horno. Dejamos enfriar. Una vez frío, cortamos los pastelitos y listo.
Deliciosos para acompañar el café.
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