Esta receta la he encontrado en un libro de cocina antiguo. En él no aparecen fotografías de los platos, así que he interpretado la presentación según la descripción que de la receta se hace. En la fotografía que pongo puede parecer una presentación antigua, propia de nuestras abuelas, pero a mi me parece con mucho encanto y, además, y quizás lo importante, está riquísima. Es un plato muy completo que podemos acompañar de una ensalada o verdura. Rico de verdad.
INGREDIENTES (para 4 personas):
- 300 gr. de salchichas frescas
- 1/2 kg. de magro de cerdo cortado en daditos
- 1 cebolla grande
- 1/2 pimiento rojo
- pimienta negra molida
- un pellizco de nuez moscada molida
- un pellizco de canela molida
- 1/2 vaso (de los de agua) de vermut
- 2 cucharadas de soja
- 75 gr. de almendras picadas
- 1 cucharadita de azúcar moreno
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 2 huevos cocidos
- sal
PREPARACIÓN:
Quitar la piel a la cebolla y cortar muy menuda al igual que el pimiento. Poner a sofreír en una sartén con el aceite y un pellizco de sal. Agregar la carne de cerdo y el resto de ingredientes, menos las salchichas y los huevos.
Una vez casi hecha la carne, la pasamos a una fuente de horno.
En la misma sartén donde hemos preparado el magro, sin añadir aceite, asamos un poco las salchichas y las colocamos después sobre la carne.
Pelamos los huevos, los cortamos en cuartos y los colocamos en el centro de la fuente. Esparcimos encima las almendras. Introducimos la fuente en el horno precalentado, a 180º C durante 15 minutos. Retirar del horno y servir.
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