Las sardinas son uno de los pescados azules más conocidos y apreciados a nivel mundial.... bueno, quizás exagero con lo "mundial", pero sí que nos encantan en casa y, cada casa es un mundo, ¿no?, jajaja. De todos es conocida la fuente importante de omega3 del pescado azul que ayuda a mantener a raya el colesterol y los triglicéridos, la sardina además tiene un importante valor proteico y de vitaminas del grupo B y minerales como el hierro o el fósforo, ¿no os entran ganas ya de comer unas sardinitas?.
Este plato no os va a dejar olorcito sardinero en toda la casa, cosa que asusta a muchos a la hora de preparar pescados y sardinas en particular, pero creo que con lo ricas que están en cualquier preparación, un ratito de aroma a sardinas en casa no tiene importancia, ventilamos el hogar y solucionado.
Probad esta receta, segura estoy de que os va a gustar.
INGREDIENTES (para 4 personas):
- 1/2 kg. de sardinillas
- 2 puerros no muy grandes
- 2 dientes de ajo
- 1 pimiento verde
- 1/2 kg. de patatas
- 1/2 pimiento rojo no muy grande
- 1 ñora
- 1 cucharadita de pimentón de la Vera dulce
- 3 tomates medianos
- unas ramitas de perejil y hojas de hierbabuena
- 1 cucharada de azúcar
- 2 cucharadas de vinagre de manzana
- un poco de agua caliente
- hebras de azafrán
- un poquito de cúrcuma
- pimienta negra molida
- 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- sal
PREPARACIÓN:
Limpiamos las sardinillas, quitándoles las vísceras, cabeza y raspa central y las dejamos abiertas. Salamos un poco y las pasamos por harina mezclada con pan rallado. Freímos y reservamos.
En el agua agua caliente ponemos el azafrán para que infusione.
Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas gruesas. Freímos y reservamos.
Lavamos y troceamos las verduras. Ponemos una sartén al fuego con las 4 cucharadas de aceite y sofreímos uno de los ajos con los puerros, los pimientos, la ñora sin pepitas y troceada y sal. Pasados unos minutos, añadimos el tomate troceado, el perejil y la hierbabuena, el vinagre, azúcar, cúrcuma, pimienta y pimentón. Cuando esté listo retiramos del fuego y trituramos junto con el ajo que habíamos dejado sin sofreír.
Ponemos el sofrito ya triturado en una cacerola, sobre él colocamos las patatas y vertemos el agua con el azafrán. Dejamos que cueza unos minutos. Probamos el punto de sal por si hay que rectificar. Colocamos las sardinillas sobre las patatas y dejamos 3 o 4 minutos que cueza todo junto.
Retiramos la cacerola del fuego y servimos.
Está tan rico que lo prepararéis más de una vez.
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